¿Te has sentido alguna vez así?
Al entrar en un loop de quejas y diálogo negativo sólo te sentirás peor.
Detrás de toda acción siempre hay una intención positiva, veamos cuáles pueden ser las ventajas de quejarte:
-
Puede ser una forma de buscar atención o simpatía de los demás.
-
También puede ser una forma de desahogar la frustración y el estrés de la vida cotidiana.
-
Puede proporcionar una sensación temporal de alivio al enmascarar otros problemas más profundos que difícilmente se identifican.
Sin embargo, tener una actitud negativa constante puede hacer que te sientas menos atractiva socialmente, lo que puede tener efectos negativos a largo plazo.
Si sientes que te quejas con frecuencia, puede ser útil reflexionar sobre las razones detrás de tus quejas y pensar en maneras positivas de abordar tus preocupaciones.
Salir de la queja puede requerir un esfuerzo consciente y una actitud positiva hacia la vida. Aquí hay algunos consejos prácticos para ayudarte:
1. Toma conciencia de tu actitud: lo primero que debes hacer es reconocer que te quejas con frecuencia. Presta atención a tus pensamientos y expresiones verbales y evalúa si estás siendo demasiado negativa o critica.
2. Practica la gratitud: haz una lista de todas las cosas buenas en tu vida y enfoca tu atención a las cosas positivas. Agradece tanto los grandes y pequeños logros a diario.
3. Encuentra una solución: en lugar de enfocarte en el problema, busca una solución para resolverlo. En lugar de centrarte en lo que no te gusta, trata de encontrar soluciones o maneras de mejorar la situación.
4. Cambia tus pensamientos negativos: aprende a identificar y desafiar tus pensamientos negativos con evidencia que respalde lo contrario. Por ejemplo, si piensas “todo está mal” o “nada funciona para mi,” trata de pensar en algo que te haya ido bien últimamente.
5. Practica el hablar positivo: asegúrate de hablar de una manera positiva con los demás y contigo mismo. En lugar de hablar negativamente de las demás personas, trata de encontrar algo positivo sobre ellas.
6. Haz algo para cambiar tu situación en lugar de quedarte quejándote. Actúa sobre lo que te preocupa en lugar de quejarte sobre ello sin hacer nada.
Algunos ejemplos de cómo puedes cambiar declaraciones negativas en una actitud positiva:
|
Reemplaza |
Por |
|
No creo que pueda hacerlo. |
Puede ser difícil, pero lo intentaré. |
|
¿Por qué siempre me pasan cosas malas?
|
Aunque las cosas no estén funcionando como esperaba, estoy agradecida por lo que tengo. |
|
Todo el mundo me ignora.
|
Estoy agradecida por las personas que tengo en mi vida y apreciaré aún más su compañía. |
|
Odio mi trabajo.
|
No disfruto todas las tareas en mi trabajo, pero estoy agradecida por el cheque de pago y las oportunidades que me brinda. |
|
No puedo creer que no haya suficiente comida aquí.
|
Estoy agradecida por tener esta comida … y haré lo que pueda para arreglar la próxima vez. |
Al cambiar tu actitud y el lenguaje que utilizas, podrás transformar la forma en que ves el mundo y sentirte más positiva y optimista.
por Paula Cabalén
Galería de imágenes
